Hoy conmemoramos el Día de la Democracia, una jornada que nos invita a reflexionar sobre los valores que sostienen nuestro sistema democrático: la libertad, la igualdad, la justicia y el respeto a la dignidad humana.

La democracia no es únicamente un sistema político, sino también un entramado de garantías jurídicas que permiten a la ciudadanía ejercer sus derechos y participar activamente en la vida pública. En este contexto, la abogacía desempeña un papel esencial como garante de que dichos derechos no se conviertan en meras declaraciones, sino en realidades efectivas y exigibles.

La función social de la abogacía

El trabajo de los abogados y abogadas trasciende la defensa de intereses particulares: constituye un pilar fundamental para la tutela judicial efectiva, reconocida en el artículo 24 de la Constitución Española. Sin un acceso real y efectivo a la justicia, la democracia pierde su sentido más profundo, pues los ciudadanos carecen de los mecanismos necesarios para proteger sus libertades frente a posibles abusos de poder o vulneraciones de derechos.

Democracia y Estado de Derecho

El Estado de Derecho es la expresión jurídica de la democracia. Supone que todos los poderes públicos están sometidos a la ley y que existe un control jurisdiccional efectivo sobre su actuación. La abogacía, como intermediaria entre la ciudadanía y el sistema judicial, contribuye a que este principio se materialice en cada procedimiento y en cada resolución.

Una responsabilidad colectiva

En Rocha Paus Grupo Legal creemos que la democracia se fortalece día a día a través del ejercicio consciente y responsable de nuestros derechos, y que la abogacía debe actuar con rigor, independencia y compromiso ético para que esa democracia se mantenga viva, dinámica y cercana a las personas.

Hoy más que nunca, reivindicamos nuestro papel en la defensa de la legalidad, la equidad y los valores democráticos, convencidos de que solo así puede garantizarse una sociedad libre, justa y plural.