Existe una competitividad en la captación de clientes por parte los Despachos profesionales que, muchas veces, provoca que el mismo no reciba el mejor de los asesoramientos.

Un despacho de abogados, además de un lugar donde los clientes buscan soluciones, es una empresa. El pago de la factura de alquiler, servicios, sueldos, etc. hace que muchos compañeros asuman asuntos en los que realmente no se sienten 100% cómodos trabajando.

No obstante, en ocasiones, el miedo a la competencia provoca que derivar el tema a alguien más especializado, o colaborar con otros compañeros más entendidos en la materia, no sean opciones para muchos abogados. Es entonces cuando deciden asumir un asunto que, muy probablemente, esté abocado al fracaso.

En ROCHA PAUS GRUPO LEGAL contamos con una amplia red de compañeros y colaboradores de su entera confianza con los que, llegado el momento y si el asunto lo requiere, trabajamos para obtener el mejor resultado para nuestros clientes. Cuando ello sucede, nuestros clientes también entran en contacto directo con dichos profesionales, pues es la mejor forma de que nuestro compañero reciba la información que precisa para desarrollar su trabajo.

Aunque no es una regla matemática, la excelencia y viabilidad de un asunto es directamente proporcional al tiempo y esfuerzo que se le dedica

Es sencillo para un Letrado distinguir cuando un escrito o asunto se ha llevado de forma diligente o no. La diligencia no siempre va vinculada a la inteligencia o veteranía que un abogado tenga, sino al tiempo dedicado a la preparación y estudio del tema, así como a la revisión del propio trabajo realizado.

En ROCHA PAUS GRUPO LEGAL creemos firmemente en los beneficios del trabajo en equipo. Por ello, todos los asuntos son trabajados por un mínimo de dos abogados, en el que uno de ellos será el socio de la firma. Ello supone una mejora sustancial en la calidad de los escritos y documentos elaborados, así como en la preparación de vistas y juicios.

El trabajo del abogado es tan complejo y precisa tanta dedicación para la obtención de éxitos que, en ocasiones y erróneamente, se descuida la exigencia de información continua que requiere el cliente sobre su asunto.

La preparación de escritos judiciales, administrativos, contratos y demás documentos en los que interviene un Letrado, así como la preparación de juicios, audiencias previas, reuniones, etc. requiere una dedicación de horas de trabajo elevada si lo que se quiere es obtener el mejor resultado posible.

No hay dos asuntos idénticos, cada problema de nuestros clientes debe ser escuchado con detalle y estudiado a fondo, lo cual lleva aparejado el estudio de la documentación facilitada, el análisis constante de jurisprudencia, el estudio de doctrina, la detección de precedentes similares, etc. para después preparar el documento o estrategia adecuada. Dado su carácter intangible, este no es un trabajo perceptible por el cliente y, por tanto, en ocasiones no es valorado.

En cambio, lo que sí percibe el cliente es si su abogado lo llama con carácter habitual para informarle de unas novedades que en muchas ocasiones no existen, dada la lentitud del sistema judicial. Siendo estas gestiones telefónicas algo que -en sentido práctico, y desde el punto de vista técnico del profesional- no aporta valor al éxito del asunto en concreto, los abogados muchas veces optan por la practicidad de dedicar su tiempo limitado a aquel trabajo que contribuirá al éxito del asunto, en lugar de realizar esa labor informativa con el cliente.

Esta conducta puede llegar a molestar al cliente, que se siente abandonado a su suerte porque cree que el hecho de que su abogado no le llame implica que se ha olvidado de su asunto, cuando realmente no es así.

Además de un sistema de CRM en el que se refleja el estado de cada asunto, para evitar este tipo de situaciones que todo abogado ha sufrido alguna vez, en ROCHA PAUS GRUPO LEGAL nos aseguramos de que todos los asuntos sean llevados por dos profesionales, así el cliente siempre tendrá dos personas de contacto en el despacho a quien poder acudir cuando quiera conocer el estado de su caso. Estas dos personas coincidirán con los dos Letrados asignados para su asunto, lo cual garantiza el conocimiento absoluto del mismo.

De igual modo, hemos implantado un Área de Clientes que, de momento será accesible a todos nuestros clientes de Asesoría, empresas y autónomos, donde podrán acceder de forma inmediata a toda su información. Estamos trabajando para que el resto de nuestra base de clientes también pueda beneficiarse de este servicio.

La especialización es imprescindible, pero la vida y los problemas no se clasifican en ramas del Derecho ni jurisdicciones.

Son muchos los Despachos que abogan por la hiper especialización de sus profesionales, pero se olvidan de que, para poder hacer una asignación del asunto al Letrado especializado que deba encargarse, deben tenerse conocimientos mínimos del resto de áreas del Derecho.

Cuando un cliente expone su asunto en la primera reunión, el Abogado debe estar atento al relato y debe tener la capacidad de discernir qué herramientas jurídicas tiene a su disposición para ofrecer el mejor de los servicios; y ello, sin importar su especialidad. Porque un asunto que a priori podría parecer una cuestión de Derecho Público podría también tener cabida en un procedimiento penal. ¿O acaso no existen decisiones administrativas que, al margen de ser impugnadas en la vía contencioso-administrativa, pueden revestir de indicios delictivos que puedan dar lugar a una querella por prevaricación?